El sueño roto de Riesgo

La normativa inglesa que no permite a ningún club tener más de 17 jugadores extranjeros en su plantilla es el motivo por el que el acuerdo de Asier Riesgo con el Manchester City no se ha hecho efectivo. El conjunto británico tenía cubiertas todas las fichas de futbolistas foráneos y no fue capaz de dar salida a ningún jugador en la última semana, pese a que hasta hace poco mantuvo abierta la opción de Riesgo. De hecho, los citizens esperaron hasta el último día del mercado para cerrar su portería. Sin opciones de dar luz verde a la llegada del guipuzcoano, en los despachos del Etihad lograron la cesión del veterano Scott Carson.

El portero vasco esperaba desde Deba una llamada de Txiki Beguiristain y de su buen amigo Xabier Mancisidor. El teléfono nunca sonó. Atrás queda un mes y medio en el que la portería del Etihad ha sido una opción real para el ex del Eibar, pese a la incredulidad de muchos cuando se conoció el interés del City.

Riesgo tenía cerrado un acuerdo por una temporada con el conjunto británico y la posibilidad de continuar en el club inglés una vez se retirara como entrenador de porteros en las categorías inferiores. De vivir a la sombra de Dmitrovic los dos últimos años a aterrizar en un equipo llamado a pelear por todos los títulos. Un escenario que habría sido una utopía hace unos meses. Guardiola quería un tercer portero del perfil de Riesgo, con experiencia y la capacidad para saber convivir en el vestuario sin tener minutos. Asier, que en Ipurua nunca ha puesto una mala cara, cumplía con los requisitos.

A tres semanas para que se cierre el mercado de fichajes, Riesgo se encuentra en una situación complicada. Sin equipo después de haber rechazado la oferta del Eibar y ver como el tren del Manchester City se escapaba, el guardameta debarra tendrá que buscar un destino en lo que queda de agosto. No se plantea colgar los guantes. Opciones de Segunda no le van a faltar, aunque los dos escenarios que manejaba están desechados. El Eibar no le ha cerrado nunca la puerta, pero es prácticamente imposible que el ex de Real Sociedad y Osasuna vuelva a Ipurua. Quiere disfrutar de sus últimos años sobre la portería y en Ipurua los palos son propiedad de Dmitrovic.