Una desafortunada lesión ha abierto las puertas de la selección danesa a un guardameta con mucha historia. No porque él haya tenido una gran carrera (tiene 25 años y todavía no ha debutado con la absoluta), sino porque es hijo de un mítico portero de Dinamarca. Kasper Schmeichel jugará su primera Eurocopa después de que Thomas Sorensen se lesionara en la espalda durante el amistoso ante Brasil.
Morten Olsen no se lo pensó dos veces y llamó a filas a un Kasper que ya se encontraba disfrutando de sus días de vacaciones. De esta manera, el joven guardameta que milita en el Leicester de la Championship inglesa coge el testigo de su padre 20 años después. Peter Schmeichel hizo historia con su selección después de conquistar la primera y única Eurocopa para Dinamarca en Suecia 1992.
En aquel torneo, Schmeichel senior encajó tan solo cuatro goles en los cinco partidos que disputó Dinamarca para llevarse el trofeo. Fue clave en aquel equipo etiquetado como 'la dinamita roja' y llegó incluso a entrar en el once ideal de la Eurocopa de 1992.
En aquella época era considerado como uno de los mejores porteros del mundo. En 1991 fichó por el Manchester United y en sus ocho temporadas como 'red devil' sirvieron para convertirse en uno de los más destacados guardametas en la historia del club inglés. Gran parte de sus títulos que ostenta en su palmarés llegaron durante su etapa en el Manchester United.
La sombra de su padre fue demasiado alargada
Kasper nació en Copenhague el 5 de noviembre de 1986 pero creció en Manchester ya que su padre defendió la portería del United desde 1991. Schmeichel junior tuvo al mejor maestro... pero la sombra de Peter fue demasiado alargada. Su hijo nunca pudo alcanzar los éxitos de su padre y aunque ha sido internacional con las categorías inferiores de Dinamarca, aún no ha debutado con los mayores.
Con 25 años de edad ya ha jugado en equipos como el Manchester City, Notts County o Leeds United. Desde 2011 defiende los colores del Leicester City en la Championship y ahora le llega una oportunidad de oro para demostrar que la saga Schmeichel sigue dando tardes de gloria. Kasper tiene más complicado ser el portero titular de Dinamarca pero intentará aportar su granito de arena para que los de Morten Olsen intenten parecerse a aquella selección que enamoró en la Eurocopa de Suecia en 1992
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