El esloveno tuvo poco trabajo en el partido contra el Leganés, donde se mostró seguro por arriba. Desde el gol de Bale no ha vuelto a encajar
El Atlético sabe que le tocará sufrir en Turín, donde la Juventus prepara un ambiente ensordecedor para tratar de intimidar al equipo rojiblanco. Para ese encuentro será vital mantener la portería a cero con el 2-0 cosechado en la ida y para ello Simeone se agarra a la fortaleza defensiva, con Godín y Giménez como kriptonita de Cristiano y a Oblak bajo los palos.
El meta esloveno portó por primera vez el brazalete de capitán del Atlético en el partido frente al Leganés, una vez fue sustituido Griezmann en el descanso, y dejó la portería a cero por quinto encuentro consecutivo. Desde el 1-3 en el derbi contra el Real Madrid, donde Bale sentenció el encuentro con un disparo cruzado en el minuto 73, el Atlético no ha vuelto a recibir gol.
Un mes exacto, ya que el derbi se jugó el 9 de febrero. Ahora ya son 467 minutos consecutivos en los que ningún remate ha conseguido superar a Oblak. Si contra el Leganés tuvo un partido con poco trabajo, actuando principalmente en centros laterales, frente al Rayo dejó una gran parada a De Tomás en el siguiente partido al del Madrid. Ante la Juventus fueron dos sus intervenciones, a remates de Cristiano y Bernardeschi. Frente al Villarreal dejó una gran parada con el pie a disparo de Ekambi y la semana pasada dejó una intervención de mérito a cabezazo de Merino en Anoeta.
Un total de cinco partidos sin encajar donde lograr un sexto aseguraría el pase a los cuartos de final de Champions. De momento, Oblak continúa sin renovar su contrato, pero el acuerdo se encuentra muy cercano. Sus galones como rojiblanco siguen creciendo, algo que demuestra su capitanía frente al Leganés.
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