Mañana visita el Calderón el Zaragoza y la portería del equipo aragonés la defenderá un viejo conocido del Atlético, el meta Roberto. Su nombre está encima de la mesa de Caminero como posible refuerzo para la portería rojiblanca la próxima campaña. AS adelantó el pasado 16 de noviembre que Andrés Fernández, de Osasuna, es el meta elegido para sustituir a Courtois, si el belga finalmente se marcha al finalizar esta campaña. Andrés es el gran objetivo, pero Caminero maneja otros nombres y Roberto es uno de ellos.
El gran problema sería el económico, pues Roberto salió del Benfica por un precio de 8,5 millones de euros. El portero pertenece a un fondo de inversión y no será un jugador barato, más viendo la gran temporada que está realizando. Sus buenas actuaciones han despertado el interés de varios clubes y el Atlético está muy atento a todo lo que pase con él.
Precisamente, un Atlético-Zaragoza fue el que marcó el devenir en la portería rojiblanca de estos últimos años. El 30 de septiembre de 2009 el Atlético visitó en Champions el feudo del Oporto con Roberto como titular. Se lesionó y su lugar lo ocupó un joven De Gea. En ese partido con el Oporto marcó Falcao. Asenjo, el otro portero del Atlético, estaba defendiendo a España en el Mundial Sub-20 de Egipto. De Gea no desaprovechó ya esa oportunidad y tres días después del choque de Oporto, el Atlético se midió en Liga ante el Zaragoza. De Gea fue titular, el Atlético ganó 2-1, el cancerbero paró un penalti y fue uno de los mejores del partido. La historia resultante es conocida, con De Gea ya como fijo en la portería rojiblanca hasta su marcha al Manchester United.
Ahora regresa Roberto y su presencia será una de las atracciones del encuentro, con la dirección deportiva del Atlético pendiente de su actuación. Roberto se formó en las categorías inferiores del club madrileño, aunque no llegó a triunfar en el Atlético. Fue cedido al Gimnástic y al Recreativo antes de marcharse al Zaragoza desde donde recaló en el Benfica. Posteriormente ha vuelto al club aragonés, donde es uno de sus mejores más destacados. Uno de las espinas que tiene clavadas en su carrera deportiva es no haber cuajado en el Atlético.
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