Víctor Valdés sigue sin pronunciarse sobre su futuro, aunque en el club ya dan por hecho que no cumplirá la temporada que le queda y el Mónaco podría ser su próximo destino. Si es así, al portero que ha defendido la meta azulgrana durante los últimos 10 años le quedan dos partidos para despedirse de su afición: Valladolid y Málaga. Y depende de él.
Valdés se ha perdido los dos últimos encuentros de Liga frente al Betis y el Atlético por culpa de una fascitis plantar en el pie izquierdo. Tras perderse la visita del conjunto andaluz, el portero se entrenó durante la semana con normalidad, pero un día antes del partido ante el Atlético el club informó que había recaído de su lesión. Además, tal y como explicó Vilanova, al forzar sufrió una contractura en el gemelo.
Valdés lleva con la fascitis plantar desde hace tiempo. La temporada pasada ya tenía molestias en el pie izquierdo que no le impidieron jugar. Durante esta también ha aguantado, pero ahora parece que la lesión se ha agravado lo suficiente como para impedirle disputar los dos últimos encuentros.
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