
El holandés ya lleva tiempo buscando equipo. Quiere jugar más y en el Barça, donde entienden su situación, ya le han dicho que le dejarán salir si trae una oferta en condiciones. Mientras tanto, a Jasper no le queda otra que ir resolviendo sus compromisos con toda la profesionalidad de la que es capaz. Y eso, en este caso, es mucho.
El partido en el Camp Nou, ante el Tottenham, sirvió para que muchos se dieran cuenta de la magnitud del derroche que el Barcelona está haciendo en su portería. Llámenlo privilegio si quieren. El caso es que el Barça tiene en el exguardameta del Ajax a un portero con mayúsculas. Anoche fue el principal responsable de que el Tottenham no se llevara un mejor resultado de su visita al feudo azulgrana.
Como si las semanas en el banquillo no le causaran mella, Cillessen fue anoche un portero enorme, digno de una gran noche europea El Barça no se jugaba nada, pero él sí. Demostrar que es demasiado portero para estar en un banquillo la mayor parte de la temporada.
Detuvo no menos de cuatro ocasiones claras de los ingleses. Algunas con intervenciones de gran mérito. Ya fuera por colocación o por estiradas de puro reflejo, Cillessen resultó tan decisivo en la contienda como Ousmane Dembélé. el mejor cartel posible Desde luego, una actuación como la de anoche sirve para que los grandes de Europa vuelvan a tener en su radar al guardameta neerlandés, si es que no lo tenían ya. Que no dejara su portería a cero fue más culpa de su defensa, que de él. Nada que reprocharle.
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