"El año próximo nos queremos superar"

Iker Casillas cumplió ayer domingo 31 años y, como él mismo reconoce: "Estoy en mi mejor momento". No es el cumple de un futbolista cualquiera. Es un día especial para el que lleva el brazalete de capitán del Real Madrid y de la selección española. Un tipo sencillo, humilde, carismático, distinto y, por qué no decirlo, que tiene un ángel.

A sus 31 años acaba de celebrar la consecución de su quinta Liga, un título que le ha llenado, a pesar de tener ya una carrera exitosa. "Sí, ha sido una Liga muy difícil de ganar, que nos ha costado mucho por el alto nivel competitivo de un rival como el Barcelona y la verdad es que tenemos que estar satisfechos del trabajo que hemos hecho todos. Pero yo quiero más y la próxima temporada queremos superarnos", dice Iker.

Con 31 años se podría entender que entra en una edad peligrosa, de riesgo. Para cualquier jugador de campo significa meterse en la recta final de su carrera, en un momento en el que tiene que apurar cada uno de los partidos. Pero un portero, una demarcación distinta a la de otras, no tiene el mismo desgaste. A Casillas le queda cuerda para rato.

Acaba con 36 años
Hay que recordar que su contrato con el Real Madrid finaliza en 2017, cuando haya cumplido 36 años. Firmó un contrato vitalicio durante el mandato del anterior presidente, Ramón Calderón, que llegado a 2017 se puede ir prorrogando en función de una cantidad de partidos disputados.

No sería nada extraño que Casillas siguiera en el Real Madrid pasados los 36 años. Hay un caso reciente, el del portero holandés Edwin van der Sar, que colgó los guantes con 40 años. Sirve este ejemplo para darse cuenta que la vida futbolística de un portero es mayor. "Yo me quiero retirar en el Real Madrid. Empecé aquí, me siento madridista y no me veo con otra camiseta", ha reconocido el propio Casillas.

Debutó con 17 años en la portería blanca. Fue en San Mamés, de la mano de Del Bosque, y hoy, a sus 31 años, sigue con la ilusión intacta. Y, lo más importante, está en su plenitud. No ha sufrido lesiones. Si algo ha vuelto a demostrar esta temporada es que mantiene intacta su agilidad, reflejos y capacidad de resistencia. Ha vuelto a ser decisivo.

El día de la Séptima
Hoy, 20 de mayo, es el día de San Iker para el madridismo. Pero también lo es, casualidades del fútbol, el aniversario de otro día histórico. La consecución de la séptima Copa de Europa en Ámsterdam. Hace 14 años que el Real Madrid entrenado por Heynckes ganó a la Juventus de Zidane. Y ese día, Casillas tenía 17 años. Un año después empezó su carrera en este equipo.

Iker Casillas ha ganado ya los mejores títulos que puede lograr un futbolista a lo largo de su carrera. Además de las cinco Ligas mencionadas, tiene dos Champions, tres Supercopas de España, una Intercontinental y una Supercopa de Europa. Esto con el Real Madrid. Con la selección ha conseguido levantar la Eurocopa de 2008 y el Mundial de 2010. Ha sido protagonista y decisivo en estas dos competiciones que han hecho, por fin, a la selección española una de las potencias más temibles del fútbol mundial.

Su palmarés es envidiable y, como persona, se caracteriza por su sencillez. Le gusta estar con la familia, sus amigos, ir al cine y colaborar con distintos proyectos solidarios. Su fundación es una de las más activas, colabora con la de Rafa Nadal, y ha demostrado en muchos momentos que es capaz de ocupar su tiempo libre para ayudar en fines solidarios. Hoy, a sus 31 años, España puede decir que tiene el mejor portero del mundo.