No jugaron en la primera jornada por decisión técnica pero sí lo podrían hacer en la segunda frente al equipo al que realmente pertenecen. Andrii Lunin, Javi Sánchez y Jorge de Frutos fueron cedidos por el Real Madrid al Real Valladolid hasta el próximo 30 de junio, pero ninguno de los tres tiene la conocida como "cláusula del miedo" o más vulgarmente "del cagazo".
Una condición que durante los últimos años venía siendo habitual en el fútbol español, poniendo una cantidad económica habitualmente elevada como condicionante para que determinado jugador pueda enfrentarse con otra camiseta al conjunto que tiene su propiedad. El objetivo es evitar que un futbolista que pertenece a un club genere un perjuicio deportivo a su propia entidad.
El Real Madrid ha roto con esa situación, que vivió un capítulo curioso a finales de la pasada temporada, cuando el Rayo rogó al Madrid que retirase la cláusula para que Raúl de Tomás pudiese jugar un partido que parecía clave para la permanencia rayista. No lo hizo y De Tomás no pudo actuar, si bien el Rayo terminó ganando aunque finalmente descendió.
Según La Sexta, la eliminación de esta cláusula para los jugadores propiedad del Real Madrid cedidos en otros clubes es general y todos podrán jugar frente a los de Zidane. La nómina incluye a Borja Mayoral (Levante), Odegaard (Real Sociedad), Óscar (Leganés), Kubo (Mallorca) y Reguilón (Sevilla).
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