La 'operación remontada' de Courtois en el Real Madrid

Courtois vuelve a Madrid con ganas de hacer borrón y cuenta nueva. La aventura con la selección no ha terminado de la mejor manera posible para el meta belga y ha despertado viejos fantasmas, pero regresa a Valdebebas con la ilusión de unirse a la clara mejoría del equipo con la llegada de Solari. Courtois necesita resetearse y la buena dinámica en la que se encuentra el Madrid en las dos últimas semanas es la mejor terapia para que Thibaut recupere su mejor versión bajo la portería blanca.

No ha sido un comienzo fácil en el Real Madrid para Courtois. Todo han sido contratiempos en sus primeros compases de blanco. Para empezar llegó tarde, prolongó su tiempo de inactividad tras el Mundial hasta que se solucionó su futuro con el Chelsea y se encontró una situación difícil en un vestuario que sentía y siente una debilidad especial por Keylor Navas. Thibaut era un fichaje galáctico. Una incorporación estelar que suponía un salto de calidad en una posición que el club deseaba reforzar, pero que suponía al mismo tiempo una amenaza para el estatus de Keylor, que llevaba tres años mandando en la portería madridista, los mismo que llevaba el Real Madrid ganando la Champions.

Courtois ha superado esa situación de tensión. Lo ha hecho con humildad y ganándose, en primer lugar, al propio Keylor Navas, que ve en el belga un compañero honesto con el que está trabajando muy a gusto y que se ha ganado su respeto en ese sentido. Al margen de la competencia entre ellos, la realidad es que su relación es muy buena y esto ha ayudado a Courtois a integrarse y a coger mayor confianza una vez que Solari le ha convertido en titularísimo.

Máximo respeto

Porque en todo este tiempo desde la llegada de Courtois ha generado más desgaste el reparto de la portería implantado por Lopetegui que la relación entre Keylor y Courtois, marcada por la normalidad y el respeto. Ahora con Solari el estatus de la portería ha dado un giro. Un movimiento que Keylor ha aceptado y con el que el técnico entregaba las llaves de la meta blanca a un Courtois que se hace cargo de Liga y Champions.

Con el debate de la portería finiquitado, Courtois sólo tiene que centrarse en ir recuperando poco a poco sensaciones. Y lo va haciendo ayudado por la buena dinámica en la que ha entrado al equipo. Courtois sufrió las peores consecuencias de la crisis blanca, que se cebó en la Liga, competición en la que jugaba el belga. Ahora la situación ha cambiado y Thibaut se ha subido al carro. Se nota en su rendimiento -tuvo grandes intervenciones ante el Celta- y, sobre todo, en sus estadísticas, encajando dos goles en los últimos tres partidos, en dos de los cuales consiguió dejar la portería a cero.

Se abre por tanto una nueva etapa para Courtois, que no lo ha tenido nada fácil hasta ahora, arrastrado por los malos resultados que acompañaban al equipo y por todos los contratiempos que habían generado una tormenta que afecta más a los recién llegados, más en el caso de un Courtois que fue el fichaje más sonado del Real Madrid.

Se puede decir que Courtois empieza de cero. Que el parón es un punto de inflexión, un nuevo comienzo de su etapa en el conjunto blanco que ha estado marcada por una dinámica negativa y por situaciones que se escapaban a lo puramente deportivo. Pero la era Solari no sólo ha traído buenos resultados, también la tranquilidad necesaria para que muchos futbolistas remonten. Uno de ellos es Courtois.