
Hay tres factores por los que cualquier cantera florece: filosofía de club, tiempos de crisis y el entrenador del primer equipo. Si el técnico no cree en su cantera, el mensaje es demoledor para los chicos de abajo. Es verdad que han debutado muchos chicos con
Mou, pero cuántos cuentan en realidad. El
Madrid busca un lateral y ninguno de los nombres que baraja superará a
Dani Carvajal. Creo que más que echar la puerta abajo, como dejó en la historia la frase de
José Antonio Camacho, los jóvenes valores tienen que saber que esa puerta está abierta por el entrenador del primer equipo. Es un mensaje de ilusión, de club, de identidad, en lo bueno y en lo malo. Eso decían las lágrimas de los jóvenes del
Athletic en Bucarest, sin ir más lejos. La historia del
Real Madrid nos demuestra que la cantera del club ha sido prolífica en porteros del primer equipo:
Miguel Ángel,
García Remón,
Agustín,
Ochotorena y, cómo no,
Iker Casillas. Nunca habrían defendido la portería del
Madrid si no hubiesen encontrado esa puerta abierta.
En los últimos años, la 'Fábrica de rivales', que sigue siendo a día de hoy la cantera blanca, no ha dejado de producir. El impresionante trabajo de Manuel Amieiro en la época de Del Bosque lo han saboreado otros clubes de la Liga BBVA con Diego López, Quico Casilla, Codina, Cobeño, por ejemplo. Ahora le toca el turno de irse a Adán en busca de minutos. Pero el ciclo debe volver a empezar. Aún recuerdo esa bonita metáfora que siempre se decía en algún despacho de la zona noble del Santiago Bernabéu: "Es bueno que las llaves de la puerta las tenga siempre alguien que conozca la casa...".
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